Danza de seducción (parte 2)
Cautivada por su grosor, vi cómo se alzaba y se asomaba el glande. El hombre dejó caer la toalla finalmente exponiendo la elasticidad y firmeza de su polla. Cerró mi boca abierta con los nudillos de sus dedos y me alzó el rostro para que me encontrar con el fulgor y radiante verde de sus ojos.
Danza de seducción (parte 1)
Sus movimientos eran como poesía entonada al aire, cada uno de sus gestos, de sus pasos, de sus saltos, y las caricias que regalaba con soltura y generosidad. Con el torso desnudo, lo único que impedía su desnudez eran los ajustados mallas color carne de licra, que debían facilitar su baile. Una ami
Fantasías de medianoche
Acababan de dar las dos en el reloj de cuco del comedor. Pendiente de la alarma del móvil que no tardaría en sonar, no hacía más que dos días que había quedado con un muchacho en una aplicación muy conocida de Internet. Estaba nerviosa. Nunca antes había cometido lo que para mí se me antojaba una in